Ferry Almería - Melilla


En Movelia encontrarás billetes de ferry Almería - Melilla directos gracias a la integración en nuestra plataforma de todas los servicios de Armas Trasmediterránea. Con increíbles precios para viajar entre estas dos fantásticas ciudades, encontrarás varios servicios diarios desde 70€. Además, recuerda que en nuestra web, podrás combinar cualquier travesía en ferry, con las más de 100.000 alternativas que tenemos disponibles.

Información de los ferries Almería - Melilla

EmpresaArmas Trasmediterránea
Estación marítima de salidaPuerto de Almería
Estación marítima de llegadaPuerto de Melilla
Tipo de ServicioDirecto
Tiempo 7h

¿Cómo comprar billetes de ferry Almería - Melilla?

En nuestra página web puedes comprar tus billetes de ferry Almería - Melilla en una transacción 100% online. Introduce tu origen, destino y fecha de viaje y recibirás tus billetes en el correo electrónico en cuestión de minutos la confirmación de tu reserva que posteriormente tendrás que canjear en la taquilla de la naviera situada en el puerto. Es importante que si tu viaje es de ida y vuelta conserves en todo momento la confirmación de la reserva para poder canjearlo a la vuelta.

Consulta horarios y reserva tu plaza. Además, ¡encuentra siempre todos los descuentos disponibles!

Para consultar los horarios disponibles para tus fechas de viajes en ferries Almería - Melilla aquí. Encontrarás todos los horarios disponibles y podrás seleccionar el tipo de asiento del ferry en el que quieres viajar. Movelia siempre muestra todas las tarifas, promociones y descuentos disponibles por lo que siempre comprarás tus billetes de ferry Almería - Melilla al mejor precio.

Precio:
Desde 70€

Primer Ferry:
23:30h

Último Ferry:
23:30h

Frecuencia:
1 servicio diario

¿De dónde salen y a dónde llegan los ferries Almería - Melilla?

Los ferries entre Almería y Melilla salen desde El Puerto de Almería. La distancia entre el centro de Almería y el Puerto es de aproximadamente 2,9 km, lo que se traduce en unos 30 a 35 minutos caminando. Además, varias líneas de autobús urbano conectan el centro con el Puerto de Almería. La Línea L6: El Puche - Pescadería, la Línea L30: Almería - Aeropuerto - Retamar y la Línea M-330: Almería - Aguadulce - Roquetas - Las Marinas. Por ejemplo, la línea M-330 opera desde las 6:45 hasta las 0:23, con frecuencias variables según la hora del día.

Los ferries llegan al Puerto de Melilla. Ir desde el Puerto de Melilla hasta el centro de la ciudad es muy sencillo y rápido, ya que ambos puntos están muy próximos entre sí. La distancia es de aproximadamente 600 metros, lo que te puede costar entre 7 y 10 minutos caminando. Desde la salida del puerto, basta con tomar la Avenida de Juan Carlos I, que te lleva directamente al corazón del centro, donde están la Plaza de España, la Asamblea de Melilla y la zona comercial. Melilla también tiene una red limitada de autobuses urbanos.

¿Qué ver si viajo en ferry entre Almería y Melilla?

Melilla es uno de los destinos más singulares y fascinantes del norte de África… ¡y seguro que te sorprenderá! Si tienes pensado viajar a esta ciudad española bañada por el Mediterráneo y con alma multicultural, no te pierdas:

El centro histórico con su mezcla de arquitectura modernista y colonial, la impresionante Ciudadela o Melilla La Vieja con sus murallas y vistas al mar, el Puerto Noray con su animado ambiente náutico, la plaza de España y su imponente Palacio de la Asamblea, la playa de San Lorenzo perfecta para relajarse, el Parque Hernández lleno de palmeras y fuentes, la Ruta del Modernismo con obras de Enrique Nieto, discípulo de Gaudí, el Museo de Melilla para entender su historia, el barrio del Real con sabor tradicional, los atardeceres desde el Paseo Marítimo, los sabores de la cocina española y marroquí en perfecta fusión… ¡y mucho más por descubrir!

¿Qué hacer en Melilla?

Melilla, entre la historia mediterránea y la modernidad multicultural. Ciudad española situada en la costa nororiental de África, es una joya única donde convergen historia, cultura y modernidad en un entorno mediterráneo incomparable. Frente al mar, esta ciudad fortificada ha sido un punto estratégico durante siglos, reflejando una mezcla singular de tradiciones europeas, bereberes, árabes y judías que la convierten en un crisol de identidades y vivencias.

Fundada como enclave militar y comercial, Melilla ha evolucionado hasta convertirse en un vibrante centro urbano que combina su valioso patrimonio histórico con infraestructuras modernas y una vida cultural dinámica. Sus murallas y fortalezas, conocidas como Melilla La Vieja, custodian calles adoquinadas, plazas históricas y edificios de estilo modernista que reflejan la influencia de arquitectos como Enrique Nieto, discípulo de Gaudí. A la vez, avenidas amplias y zonas comerciales muestran el pulso contemporáneo de la ciudad.

Recorrer Melilla es sumergirse en una ciudad real y diversa. La convivencia entre diferentes comunidades es palpable en sus barrios, donde las mezquitas, iglesias y sinagogas coexisten y enriquecen el paisaje urbano. El Mercado Central, los cafés tradicionales y las plazas como la de España o Menéndez Pelayo son lugares donde la vida local se muestra auténtica y cercana.

El entorno natural también es un gran atractivo. El paseo marítimo bordea una costa llena de pequeñas playas, acantilados y calas, ideales para disfrutar del Mediterráneo. Cerca, espacios como el Monte Gurugú ofrecen rutas para el senderismo con vistas panorámicas de la ciudad, el mar y el cercano territorio marroquí. Además, el Parque Hernández proporciona un oasis verde en pleno corazón urbano, perfecto para el descanso y el paseo.

La gastronomía de Melilla es un reflejo de su identidad multicultural. Platos tradicionales españoles se mezclan con sabores árabes y bereberes, dando lugar a una cocina rica y diversa. Entre sus especialidades destacan el arroz caldoso con mariscos, el cuscús, las tapas variadas y los dulces como los pestiños o el halva, acompañados siempre por un buen vino local o un refrescante té de menta.

A lo largo del año, Melilla celebra numerosas festividades que muestran su carácter plural: desde las fiestas patronales de la Virgen de la Victoria, pasando por celebraciones musulmanas como el Ramadán, hasta actos culturales que fomentan el diálogo intercultural y artístico. Estas celebraciones convierten a Melilla en un espacio donde la tradición y la modernidad se encuentran y se enriquecen mutuamente.

Melilla no busca ser un destino masificado ni un escaparate turístico convencional. Es un lugar para quienes desean explorar la riqueza de una ciudad histórica y viva, con una identidad única en el Mediterráneo, donde cada rincón habla de convivencia, resistencia y esperanza.

Melilla, con su esencia mediterránea, su legado multicultural y su vibrante presente, es un destino imprescindible para quienes buscan autenticidad, cultura profunda y la magia de un enclave único entre continentes.